El cambio en los patrones son responsabilidad de todas, todos y todes; afirma responsable del Grupo de Masculinidades Positivas del nivel bachillerato de la UdeG
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Educación No Sexista, que se conmemora este 21 de junio, Víctor César Villalobos, bibliotecario de la Biblioteca Juan Rulfo de la Preparatoria 7 de la Universidad de Guadalajara (UdeG) consideró que los esfuerzos empleados por la máxima Casa de Estudio de Jalisco son muy importantes en relación al combate a la violencia de género, a partir de la atención de todas las personas de la comunidad, sin embargo, considera que es necesario que los programas de atención sean horizontales y trasversales.
Víctor Villalobos es uno de los encargados de dar atención a los jóvenes que trabajan dentro del Grupo de Masculinidades Positivas del nivel bachillerato, adonde llegan estudiantes que son seleccionados como una medida punitiva, luego de ser canalizados por el Consejo de Escuela de su Prepa UDG para buscar entrar en un entorno de reflexión y toma de conciencia con el objetivo de modificar los patrones de conducta.
La estrategia tiene alrededor de nueve meses de trabajo, y se emplean 16 sesiones que tienen una duración aproximada de cuatro meses, en la que los participantes analizan el contexto social de los planteamientos que se ofrecen, con la intención de identificar las normalizaciones de violencia que se emplean.
Respecto al programa, Víctor Villalobos considera que el Grupo de Masculinidades Positivas tiene muchas ventajas, y la principal es que se convierte en la posibilidad de que los hombres puedan discutir y crear nuevas formas de ejercer sus roles en la sociedad, dejando de lado conductas hegemónicas que segregan, violentan y excluyen a quienes consideran diferentes.
“Es por eso que considero que el proyecto no debería ser solamente punitivo, sino que debería estar abierto, que sea horizontal y trasversal, para que involucre a todas las Unidades de Aprendizaje y que cualquier interesado pueda ingresar al programa. Todos somos los responsables en el cambio de estos patrones. Esto no se trata de pensar en uno, sino de lograr mejores condiciones para el resto. Pensar en uno mismo es lo que nos ha llevado a este barril sin fondo y hacerlo distinto nos permitirá dar ese salto cuántico”.
En relación al Día de la Educación No Sexista, aseveró que estas dinámicas abonan a construir otros entornos sociales, “considero que una educación no sexista debe ser aquella que tenga igualdad de oportunidades para todas, todos y todes, también pienso que las situaciones biologías no deben ser un motivo de abandono escolar, o sea, debe ser tolerancia, apertura, respeto, debe incluir abiertamente a las disidencias sexuales para contar con espacios de inclusión”.
Concluyó que la UdeG ha empleado estrategias de intervención que en el mediano-largo plazo instaurarán una forma distinta de ejercer las relaciones sociales, fuera de la imposición del machismo, sin embargo, hizo un llamado a que se consideren todos los esfuerzos y se abran espacios para las y los interesados, con el fin de que las soluciones se vean también como factores preventivas y no solamente de atención a faltas.
En el Sistema de Educación Media Superior (SEMS) una de las actividades que se han promovido es generar en las Prepas UDG actividades culturales de toma de conciencia, donde se publiquen y analicen discursos y mensajes que puedan abonar a la problemática de una manera sistemática. Esto, se ha empleado por medio de las Jornadas Púrpura que se emplean desde el mes de marzo y que se emprenden desde el programa de intervención educativa Juventudes y Género, con la intención de atender el problema de manera estructural y a partir de la educación misma.
El Día Internacional de la Educación No Sexista tiene la finalidad de promover una educación participativa e igualitaria en materia de género y diversidad sexual, promoviendo la igualdad y el acceso a oportunidades.