El objetivo fue profundizar sobre los hallazgos del diagnóstico elaborado por la Universidad, el cual identifica las barreras y fortalezas de acceso a la salud
La Universidad de Guadalajara (UdeG) y ONU Mujeres celebraron un encuentro con mujeres indígenas que viven en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG), con el objetivo de profundizar sobre los hallazgos del diagnóstico elaborado por esta Casa de Estudio, el cual identifica las barreras y fortalezas de acceso a la salud.
En este encuentro participaron las diversas agencias de las Naciones Unidas en México: la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco); la Organización Internacional del Trabajo (OIT); la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) y la de Voluntarios (UNV); representantes del Gobierno de Jalisco, y de las secretarías de Salud (SS) y de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres (SISEMH).
Coincidieron que las personas indígenas tienen menos acceso a la salud debido a la pobreza y al racismo y, por lo tanto, se encuentran más vulnerables a contraer enfermedades y a sufrir complicaciones, como lo establece la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En el caso de las mujeres y las niñas indígenas la intersección de múltiples desigualdades provoca que estén en condiciones particularmente difíciles, que se agravan ante desastres y emergencias.
El Programa de Salud Intercultural de la Unidad de Apoyo a las Comunidades Indígenas (UACI), en sus acciones de intervención comunitaria para pueblos originarios en el AMG, adscrito a la Universidad de Guadalajara (UdeG) y ONU Mujeres, por conducto del Programa Ciudades Seguras, realizaron el pasado 18 de agosto un encuentro de escucha y diálogo con mujeres lideresas indígenas que habitan en el AMG, con el objetivo de profundizar sobre los hallazgos del diagnóstico elaborado por la Universidad, el cual identifica las barreras y fortalezas de acceso a la salud.
La herramienta de investigación para el diagnóstico fue un grupo de discusión realizado el 19 de febrero de 2019, en el que participaron activamente diversidad de mujeres indígenas que habitan en el AMG, de las culturas: mixteca, mazahua, purépecha, mixe y wixárika.
En esta línea, en el encuentro se logró comprender cómo se han construido históricamente las barreras para el acceso a la salud; cómo es que interactúan entre sí estas barreras y cuáles son las fortalezas para derribarlas; a través de las voces de lideresas indígenas: Esperanza Pérez Ruiz, del colectivo “Nosotras no olvidamos nuestras tradiciones” y representante purépecha; Berna Olea López, representante mixteca, y secretaria general del Comité de pueblos originarios de colonia Ferrocarril; Martha Iris Hernández González, representante de la Red promotora de derechos humanos de las mujeres indígenas en Jalisco (PRODEMI); acompañadas de Gabriela Juárez Piña, coordinadora del diagnóstico.
El diagnóstico arroja la importancia de “reivindicar el uso de la medicina tradicional de acuerdo con sus resultados empíricos y posición del modelo médico hegemónico/alópata, incluyendo esta perspectiva a un modelo de atención intercultural de salud”.
Es así como se expusieron los siguientes hallazgos:
- Una de las principales barreras para el acceso a la salud es el distanciamiento que se da entre la relación con las instituciones de salud debido a la discriminación.
- Existe poca comprensión y el no reconocimiento a sus lenguas y a su cosmovisión, lo que dificulta la adecuada atención.
- Falta de personas traductoras de lenguas indígenas al español.
- Se percibe que en los centros de salud hay estigmatización hacia las personas que conservan la vestimenta tradicional y les llaman “migrantes”.
- Falta de reconocimiento y valor de la medicina tradicional como principal referencia para el autocuidado de la salud por encima de la medicina alópata.
- Capacidad reducida de movilidad para el acceso a los servicios.
- Analfabetismo, falta de seguridad social y trabajo informal en la población indígena.
Principales fortalezas que se identificaron
- El rol de las personas líderes indígenas defensoras de derechos para el acceso a la educación y la salud.
- Fortalecimiento de las mujeres indígenas transmisoras del conocimiento tradicional a nuevas generaciones.
- El trabajo en red colaborativo que fomentan espacios de encuentro e intercambio de saberes ancestrales.
- La revitalización de las lenguas al promover la danza y cultura.
Cierre del encuentro
Las mujeres de los pueblos originarios expusieron valiosas propuestas en torno a la problemática que padecen, como el realizar campañas de sensibilización y capacitación dirigida al personal del sector salud, complementado con la creación de un programa estatal para eliminar la discriminación contra pueblos originarios con el objetivo de prevenir, atender y erradicar las violencias relacionadas.
Lo anterior puede ser robustecido con el desarrollo de un protocolo para garantizar el acceso a la salud de las personas de los pueblos originarios con una perspectiva de interculturalidad y de género que garantice el respeto de los derechos humanos de mujeres y niñas indígenas.
En el marco del diagnóstico y como compromiso hacia el bienestar de las mujeres indígenas del AMG, Gabriela Juárez Piña, Coordinadora del diagnóstico y Responsable de intervención comunitaria del Programa Salud Intercultural Comunitaria de la UACI, dijo: “Desde el Programa de Salud Intercultural de la UdeG se continuarán fortaleciendo los procesos de prevención de salud, y el acompañamiento para la prevención a través de talleres y jornadas de salud. Además, se promoverán los sistemas tradicionales de salud, guiados por la sabiduría y experiencia de lideresas y líderes indígenas”.
ONU Mujeres reconoció el liderazgo y la resiliencia de las mujeres y niñas indígenas, y reafirmó su compromiso para no dejar a nadie atrás por medio de iniciativas en el que las mujeres y las niñas indígenas sean verdaderas protagonistas.
“Los derechos, las voces y experiencias de las mujeres indígenas en México y en todo el mundo deben ser protegidas, y sus contribuciones reconocidas y promovidas para el avance de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU”, subrayó Andrea Cházaro, coordinadora del Programa Ciudades Seguras de ONU Mujeres México.
Para saber:
Los resultados del grupo de discusión forman parte los apartados del Diagnóstico General de acceso a la salud, cuyo trabajo de campo de intervención comunitaria se ha realizado durante cinco años, de agosto de 2017 a agosto de 2022, desde el Programa de Salud intercultural Comunitaria en las acciones de intervención en el AMG, de la mano de los pueblos originarios. Lo anterior como complemento a las campañas de prevención de enfermedades actualmente vigentes.
En este proceso se ha propiciado la interacción y trabajo en conjunto con ONU Mujeres por conducto del Programa Ciudades Seguras, con acciones solidarias durante el periodo más complejo de la pandemia; con una campaña de difusión comunitaria en lenguas madres con el objetivo de prevenir el COVID-19 y la violencia de género, con un impacto en 13 colonias del AMG donde habitan pueblos de cinco culturas representativas de población indígena.
Se benefició asimismo a dicha población con productos de limpieza y despensas para sobrellevar las afectaciones sanitarias y económicas por las que atravesaban.
Según cifras del Censo de Población y Vivienda 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), 6.13 % de la población en México es indígena; en Jalisco esta población representa menos de 1 % de sus habitantes (7 millones 912 mil 955), lo que corresponde a 66 mil 963.
En el AMG se encuentran 28 mil 505 hablantes registrados en el censo del 2020 del Inegi, lo que representa 42.6 % del total de población que habla una lengua indígena y se encuentran en Guadalajara, Tlajomulco de Zúñiga, Tlaquepaque, Tonalá y Zapopan. En este último se concentra la mitad de la población de habla indígena. Los pueblos originarios a los que pertenecen son: purépecha, mixteca, zoque, triqui, otomí, mazahua, tzotzil, tzeltal, nahua (Guerrero e Hidalgo), chol, zapoteca y wixárika, entre otras.